Las enfermedades crónicas degenerativas se han vuelto el primer enemigo de la población mexicana, y la obesidad se ha vuelto la más peligrosa, porque en realidad no causa malestares o descompensaciones, que incapaciten al individuo en sus actividades cuando empieza a desarrollarse.
Sino que al igual que otras enfermedades como el cáncer o los males cardíacos, cuando presenta síntomas incapacitantes, ya está muy avanzado.
La única ventaja frente a estas otras, es que el individuo puede percatarse que está volviéndose gordo u obeso, porque la ropa comienza a no quedarle y la piel que sobra comienza a incrementarse.
De acuerdo con datos de salud pública, la obesidad y el sobrepeso son el principal problema en nuestro país, gastando entre el 25% y el 27% del presupuesto destinado a la salud, lo que anualmente significa un gasto aproximado de 120 mil millones de pesos.
La mala alimentación, el sedentarismo y la falta de acceso a alimentos nutritivos son factores determinantes del sobrepeso y la obesidad, ubicando a México en el primer lugar mundial en niños con obesidad y el segundo en adultos.
De acuerdo con Forbes México, el 70% de los adultos mexicanos padece sobrepeso u obesidad, lo que vuelve a estas personas más propensas a desarrollar problemas de salud, como hipertensión, diabetes y enfermedades crónico-degenerativas.
La obesidad no es un problema exclusivo de nuestro país, recientemente la revista científica The Lancet publicó que el número de obesos creció de 105 millones en 1975 a 641 millones en 2014, por lo que advirtieron un punto de crisis mundial en cuanto a este padecimiento, pues por primera vez la población mundial cuenta con más personas obesas que en estado de desnutrición.
Estas tendencias no pueden ser consideradas «como un problema individual o familiar, sino como un problema de toda la sociedad», afirma el director de la FAO para la región, (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura), Raúl Benítez, ya que de continuar así para el 2025 una quinta parte de la población mundial será obesa.
¿Qué hacer?
En respuesta a la demanda para combatir este problema de salud pública, la ciencia está continuamente en búsqueda de avances médicos, ya sea con nuevos tratamientos o innovando los procedimientos más conocidos.
Por lo que existen nuevos avances médicos que ayudan a frenar y mejorar la condición de obesidad de los adultos en el país, como el Balón Intragástrico Ajustable de 12 meses, que consigue dar respuesta a las necesidades de los pacientes y ofrecer un tratamiento más seguro y eficaz.
Los procedimientos deben ir acompañados además por cambios en el estilo de vida, es decir, modificaciones en la alimentación y dejando atrás la vida sedentaria. Es importante recordar que se debe considerar la situación de cada persona y ponerse en manos de personal calificado en sitios especializados.