Estar o ser gordo muchos lo ven como un insulto, un término peyorativo o un término de cariño cuando es un diminutivo como cuando le llamas gordito o gordita a tu pareja o alguno de tus padres, pero más que una condición física, cuando se trata de obesidad,es decir cuando la persona tiene un IMC mayor a 30, es un riesgo de salud, y una enfermedad grave que puede o no tener enfermedades asociadas tal como la diabetes o la hipertensión principalmente.
Además es una enfermedad sumamente cara, que agrava el problema financieramente hablando por la gran cantidad de enfermos que hay tan solo en México. Si bien es básico tener un estilo de vida saludable para alejarse del sobrepeso que es el primer riesgo y evitar la obesidad, sabemos que tener varios años enfermo, acostumbra al cuerpo a vivir en desequilibrio consigo mismo y a tender a conservar grasa en lugar de quemarla usándola como energía.
Mientras tienes sobrepeso u obesidad tipo uno, aún se puede controlar con vida saludable y en caso que el médico lo recomiende, complementar con algún fármaco. Pero si tú obesidad es grado dos, tienes alguna comorbilidad o grado tres con o sin enfermedades asociadas el tratamiento recomendado es una cirugía
¿Cómo saber si se es candidato?
De acuerdo con especialistas de la clínica bariátrica del hospital Rubén Leñero, existen puntos clave para que un paciente sea elegido para este tipo de cirugías que pueden ser manga o bypass gástrico:
- Después de dos años de intentos serios y controlados para bajar de peso no se consigan los objetivos
- Tener grado dos de obesidad con alguna comorbilidad
- Tener grado tres de obesidad con o sin comorbilidad
- Tener entre 18 y 60 años de acuerdo con lo establecido por la NOM
- Pasar por proceso psicológico o psiquiátrico para comprender los cambios a los que el paciente se enfrentará
- Pláticas informativas y grupos de apoyo al respecto de la enfermedad y su seguimiento
- Prepararse con cambio de estilo de vida previo a la cirugía, pues es vital perder todo el peso posible para evitar el hígado graso y reducir riesgo de la cirugía, pues es preciso mover el hígado para llevarla a cabo.
Este proceso llevará aproximadamente 3 meses que es el tiempo de espera para la cirugía.
Una vez realizada la cirugía, el paciente debe aprender a comer de nuevo como cuando era bebé:
- Consumir sus tabletas de vitaminas, proteínas y minerales
- Primero serán puros líquidos claros.
- Poco a poco otro tipo de jugos y licuados.
- Hasta llegar a las papillas y combinar líquidos con sólidos.
- La porción será apenas la punta de una cuchara porque el paciente debe ser consciente que en la boca cabe más comida que en el estómago.
- Debe comer muy muy lento para evitar reflujo y otros problemas intestinales.
- Cuando el paciente ha sufrido previamente de bulimia el proceso es mucho más cuidado.
- Aprender a priorizar los tipos de alimentos, sabiendo que lo más importante son las proteínas
El paciente debe llevar a cabo al pie de la letra todas las recomendaciones para concluir su procesos de forma exitosa en largo plazo, pues sólo el 60% al cabo de varios años sigue con el correcto estilo de vida y conservando su su salud.
Finalmente los expertos mencionaron que en México en esta institución se llevan a cabo de 20 mil cirugías bariátrica a al año, siendo la mayor concentración entre los 35 y 45 años de edad.
Durante la conferencia estuvo la paciente invitada quien nos compartió que en bajo 80 kilogramos durante el primer mes luego de la cirugía, ella pesaba 150 kilogramos y ahora se encuentra en los 70, se encuentra plena y feliz, sobre todo porque entendió que si tenía una vida era para disfrutarla al lado de su hija, y no quería dejarla por darse por vencida con las opciones para bajar de peso.
Actualmente la cirugía bariátrica no es cubierta por ninguna aseguradora privada, el proceso es gratuito para quienes cumplen los requisitos antes mencionados, viven en la Ciudad de México, no cuentan con ninguna seguridad social, más que seguro popular y tarjeta de gratuidad.
Al final queda mucha piel suelta, y si desean realizarse la cirugía estética re constructiva, el proceso es gratuito en la misma clínica, lo único que debe cubrir el paciente son sus insumos y la renta de los equipos, debido a que las cirugías estéticas no son cubiertas por ninguna institución pública.